Resumen Reunión Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa
Fecha: 17/11/08
Hora: 11:25 h.-13:30 h.
Asistentes:
- Por la Consejería:
D. Francisco Andrés Triguero Ruiz (Secretario General de Universidades, Investigación y Tecnología)
Dª. Susana Guitar Jiménez ((Directora General de Investigación, Tecnología y Empresa).
D. Antonio Sánchez Pozo (Director General de Universidades)
- Por FJI-Precarios:
Odil Porrúa Fuerte
Ana Petronilho
Florencio Cabello
Objetivos:
-Retomar el contacto con la Consejería tras las elecciones autonómicas de marzo (es nuestra 2ª reunión con los nuevos responsables).
-Recabar información sobre sus planes para el Perfeccionamiento y Retorno de Doctores.
-Concretar la actualización del 0+3+1 (o, a fuer de ser precisos, de la fórmula transitoria 1+3+1 que se articuló para los programas de doctorado vigentes hasta la implantación del EEES ese).
-Machacar una vez más con que nos siguen debiendo meses de cotización a la Seguridad Social.
La reunión comienza con 25 minutos de retraso, en principio sólo con Francisco Triguero (FT); minutos después se incorporan a ella Susana Guitar (SG) y Antonio Sánchez (AS).
En un clima de receptividad y amabilidad, no exento de tanteo (no tardarían en llegar las alusiones a nuestro “encuentro” con Manuel Chaves en Córdoba), FT expone que han cumplido su compromiso de estudiar la situación del personal investigador de centros andaluces (pre y postdoctoral). En este sentido, esgrime la tabla de los años 2009 y 2010 que nos hicieron llegar unos días antes de la reunión.
A partir de aquí, abordamos el orden del día que traíamos previsto:
A) PERFECCIONAMIENTO Y RETORNO
A.1. Perfeccionamiento: A este respecto, nos plantean 2 opciones separadas:
Opción 1-Programa de becas Talentia:
Sí, empezamos mal, y así se lo hicimos ver en cuanto pudimos: “¿Becas para postdoctorales? ¿Eso no era ilegal según el EPIF?”. A partir de aquí, se embarcan en una explicación que nos limitamos a transcribir. Estáis todos (especialmente los que conozcan bien este Programa, que nosotros desconocíamos en gran medida) invitados a despotricar contra este punto.
Según FT, las Talentia no son becas, sino un préstamo para realizar másters o postgrados en centros de élite de todo el mundo. Pueden estar relacionados con la investigación o no y puede optar a él cualquiera, no es requisito ser doctor. Están enfocados al retorno en el sentido de que el préstamo se amortiza en su totalidad si se trabaja posteriormente cuatro años en Andalucía (se amortiza un 25 % del préstamo cada año que se trabaja en Andalucía después de haber realizado la estancia).
Nosotros reincidimos en la incongruencia de estar luchando por realizar la tesis contratado para después, una vez obtenido el grado de doctor, continuar la labor investigadora becado con un préstamo, sin derechos laborales. Aludimos incluso al caso de Miguel Blázquez, becario FPU fallecido recientemente en Polonia y a cuya familia (presumiblemente) no corresponderá indemnización ni reparación laboral algunas por estar Miguel en la fase de beca. También les hacemos ver que una “estancia” de ese tipo, sin relación laboral alguna con programas o grupos de investigación, no permitiría a su beneficiario acumular la experiencia (o, dicho más claro, los méritos curriculares) para optar a un retorno.
Replican que la Junta no dispondría de dinero para contratar a esos postdoctorales en esos centros de élite, y que tampoco nos convendría porque si se hiciera un contrato la cantidad que recibiría el investigador seria muy inferior a la que se asigna en modo de préstamo. En este punto reponemos que previamente existía un plan de perfeccionamiento y que no teníamos noticia de que la gente se muriera de hambre en el extranjero (con datos habríamos podido defendernos mejor, pero algo había que decir). Incluso sugerimos si no se podría destinar la inversión (postdoctoral) del programa Talentia en contratos postdoctorales. FT insiste en que ellos se limitan a ayudar a marcharse con un préstamo, que no contratan porque sería muy caro, añadiendo que (¡ojo! creo que esto merece un comentario de los expertos postdoc), una vez en los centros de élite, el postdoctoral podría buscarse un contrato por su cuenta y así trabajar allí regladamente. Concluímos apuntando que el programa Talentia puede ser interesante para algunas personas, pero que no tiene nada que ver con lo que consideramos un perfeccionamiento; se trataría más bien una opción para quien quiera irse de año sabático.
Llegados a este punto, FT insiste una vez más en que la Consejería NO piensa recobrar las convocatorias abiertas de perfeccionamiento. Su argumentación gira en torno a la lógica de que la Consejería no va a financiar a personas, sino actividades y grupos de investigación, apelando además a que la Consejería no puede contratar directamente a personas (otra vez), siendo los únicos habilitados para ello alguno de los “agentes del conocimiento” (cuando estén plenamente instaurados). Cuando expliquemos la actualización del +1 postdoctoral del 1+3+1, volveremos sobre esta idea.
Opción 2-Proyectos de Excelencia:
Aquí echa el resto la Consejería, pues se han definido unas líneas prioritarias de investigación y por ellas se apuesta a tope.
FT nos informa de que los proyectos de excelencia están suficientemente dotados como para absorber a un amplio número de postdoctorales (y, de paso, para enviarlos a perfeccionarse al extranjero). Preguntamos si, tal y como expresa Chaves en su carta, el contrato posdoctoral (+1) lo están considerando como un perfeccionamiento. Nos contestan que sí, que es un contrato versátil que puede usarse para terminar trabajos o para irse al extranjero. Les decimos que como contrato puente nos parece bien; pero que como perfeccionamiento es insufuciente.
Expuesto lo anterior, FT no nos ve convencidos y nos solicita con interés y amabilidad que expresemos abiertamente nuestras dudas acerca de su modelo. Entonces le decimos que nuestra idea de carrera investigadora claramente no coincide con la suya, puesto que para nosotros hay una etapa, la del perfeccionamiento, que es muy importante y que nosotros la concebimos como un periodo de mínimo dos años (menos no da para nada) en el que el investigador, siempre contratado, cambia de grupo y de línea de investigación para conocer otros modos de trabajar otras técnicas, etc; que no tiene nada que ver con irse de sabático a hacer un máster por ahí y que si la única posibilidad de realizar esta estancia en otro centro de investigación depende de que el jefe de grupo que tiene asignado un proyecto de excelencia le “conceda” al postdoc (solicitando financiación adicional para ello) una estancia de perfeccionamiento, es altamente improbable, por no decir imposible, que esto suceda. Y ello aún más aún si, como sucede en los proyectos de excelencia andaluces, el postdoctoral es escogido digitalmente (a dedo) por el jefe. Por todo ello, concluimos que, bajo nuestro punto de vista, el perfeccionamiento está prácticamente ausente en el modelo que nos están presentando, quedando a la buena voluntad de unos jefes que tienen completamente “pillado” al postdoctoral.
Ante esto nos proponen un remiendo de los proyectos de excelencia que creo que merece la pena estudiar: un compromiso por parte de la Consejería de que las convocatorias de personal postdoc para proyectos de excelencia contemplen estancias de perfeccionamiento de uno o dos años.
A.2. Retorno. Nos recalcan otra vez que no van a financiar personas, sino actividades. En esta línea plantean varias opciones de retorno, todas ellas bastante “indirectas”, esto es, sin un programa específico como tal:
-Proyectos de Excelencia. Como siempre, la opción prioritaria son los proyectos de excelencia. Nos dicen que la macroorden permite que un investigador fuera proponga un proyecto de investigacion cuando esté fuera, sin que tenga un vínculo directo con una Universidad o un OPI de Andalucía.
Desmentimos esto, aludiendo a que nuestra propuesta para el 10% de dichos proyectos destinados a “grupos emergentes” (compuestos y dirigidos por investigadores de hasta 35 años) sí que lo habría permitido, pues no exigía dicho vínculo (esto es, el sueldo del jefe del grupo podría salir del propio grupo, y no de una relación laboral previa). FT nos desmiente a su vez, categórico: “En la Macroorden no pone que tengas que estar contratado ya en Andalucía para pedir un proyecto”. En esta punto, nos detenemos en la lectura detallada del artículo de la macroorden que lo refiere, para aclarar si es necesario estar no vinculado a algún OPI. La macrooden menciona que el investigador tiene que estar vinculado al OPI mientras se desarrolla el proyecto, pero no cuando lo propone. FT cree que eso deja la puerta abierta a que se incorpore gente de fuera, que sería contratada por el OPI con el dinero del proyecto y hete aquí la “relación laboral o estatutaria”.
Manifestamos nuestras dudas sobre la aplicabilidad de esta posiblidad dado que el investigador necesita el aval del OPI respectivo para proponer el proyecto. Nos dicen que eso siempre irá a depender de la viabilidad del proyecto y de que a la Universidad u otro organismo le interese, y que eso ya no es de su competencia. FT se muestra en este punto muy franco (lo cual es muy de agradecer) y afirma lo siguiente: la macroorden permite legalmente esta posibilidad, pero él tampoco la ve nada clara, si bien añade que la Junta siempre buscaría fórmulas de “convencer” a los OPIS de que apoyen aquellos proyectos de investigación que entren dentro de las áreas prioritarias que propone la Junta.
-Programa de incentivos I3 para la contratación. En la actualidad se está incentivando principalmente a las Universidades; pero tienen pensado incrementar los incentivos a organismos públicos de investigación y empresas.
-Empresas: Nos dicen que pretenden que los doctores empiecen a incorporarse a las empresas. En este sentido, aluden a algo que he leído al hilo del borrador de Ley de la Ciencia: que la Consejería ya está empezando a condicionar la concesión de subvenciones y ayudas del tipo I+D a que las empresas beneficiarias tengan a doctores en puestos directivos.
Da la impresión de que la Consejería ya está aplicando algunas de las propuestas que se están barajando en la Ley de la Ciencia con respecto a la “transferencia” de conocimiento, la “rentabilidad”, la implicación de las empresas en la investigación e innovación, etc. Se confirma la idea de algunos de nosotros de que Andalucía es el laboratorio del PSOE en esta materia (y ello para bien y para mal).
-Nos comentan además que hay más programas de retorno, cono el C2A, además de programas especiales para fomentar proyectos de excelencia dirigidos por mujeres.
La reflexión global de FT es la siguiente: La capacidad de las universidades para reincorporar a los retornados está empezando a ser extremadamente limitada (dada la saturación de determinadas unis y el descenso de alumnos, FT sólo se imaginaba un retorno universitario masivo a partir de futuras jubilaciones); y la del CSIC, aunque se va a ampliar levemente con la apertura de nuevos centros mixtos, pronto se agotará también. Conclusión: la Consejería no puede seguir contemplando el retorno exclusivamente enfocado a estos centros, sino que trata de incentivar indirectamente otras opciones que pasan por otros “agentes del conocimiento” (centros tecnológicos, empresas, ayudas para retornar a Andalucía a montar una empresa basada en la investigación -las Talentia también entran en este apartado, creo-, etc.).
Actualización del 1+3+1: Contratos +1
La fórmula 1+3+1, aceptada como transición hasta el advenimiento del EEES y su correspondiente 0+3+1, contemplaba la actualización de aquí a 2011 (esto es, desde los PIF incorporados en 2004 hasta los de 2007) del +1 postdoctoral (contratos postdoctorales -con sueldo postdoctoral, para más señas- para quienes hayan depositado la tesis durante su último año de ayuda).
A instancias de la propia Consejería, que no deseaba incurrir en discriminaciones, la fórmula para dicha actualización pasaría por un concurso abierto a todo PIF que perteneciera a un grupo de investigación financiado (independientemente del organismo que les concedió la beca/contrato) y que hubiera depositado su tesis en el año en curso. El número de contratos convocados lo estimábamos en 150 (esto es, en función de las 150 ayudas predoctorales que aproximadamente concede la Junta cada año).
Pues bien, FT se compromete a cumplir esto de la siguiente manera:
-Se convocará anualmente un concurso (el correspondiente al PIF que acaba en 2008 irá en la Orden de proyectos de excelencia cuya publicación está prevista para enero de 2009) de tantos contratos +1 como PIF predoctorales acaben su contrato en ese año.
Ejemplo: en 2009 acaban su contrato 132 PIFs ---> se convocan 132 contratos +1.
-Las finalidades del +1 son las que vienen especificadas en la Macroorden, entendiéndoselos globalmente como “contrato-puente”.
-A esos contratos podrá acceder cualquier PIF que haya depositado la tesis en el año en curso y que pueda seguir ligado durante ese hipotético +1 a un proyecto de investigación (financiado por quien sea, pero financiado).
-En este sentido, y como “la Junta no contrata a personas”, serán los proyectos de investigación los que soliciten ese +1 para aquellos PIF que estén incorporados en sus proyectos y que cumplan los requisitos expuestos. La Junta le concede al proyecto el dinero, y así este contrata al PIF durante ese año (de ahí que no se pueda disfrutar del +1 sin proyecto que te respalde y que, en última instancia, te contrate).
Nos dicen que nos conviene más que esto se haga por concurso y no por convocatoria porque las convocatorias deben anunciarse en el BOJA y tienen unos plazos mucho mayores. Quedaron en mandarnos el documento técnico en el que se especifica todo lo relativo al +1 y que luego se incluirá en la macroorden.
C) Seguridad Social
Reiteran que ya han ingresado el dinero correspondiente a los meses de Seguridad Social que se debían a algunos becarios y que lo demás ya no es de su competencia, sino de las Universidades y del CSIC. Nos echan en cara que nos habíamos comprometido a llevar un listado de personas afectadas. De todos modos comentamos los 40 casos detectados en Granada y las conversaciones con el Inspector de Trabajo.
Antes de despedirnos, concertamos la próxima reunión para el 27 de enero de 2009 sobre las 11 de la mañana.