La Comunidad adeuda desde julio las becas a 50 investigadores
La Comunidad adeuda desde julio las becas a 50 investigadores
''La subvención del SEF a la Fundación Séneca «está aprobada pero no transferida por dificultades de Tesorería», según la Consejería de Empleo
El Gobierno regional no aclara cuándo podrán cobrar sus sueldos de 1.100 euros al mes ''
Jóvenes y sobradamente preparados, medio centenar de becarios de la Fundación Séneca que habían hecho lo ideal para no sufrir los estragos de la crisis (licenciarse en una ingeniería o carrera científica, seguir formándose y especializarse en actividades de investigación y desarrollo), la están padeciendo pese a todo y llevan tres meses sin cobrar.
Las becas pendientes de pago están dirigidas al desarrollo de proyectos de I+D, innovación y transferencia de tecnología en diversas empresas y centros tecnológicos del sector agroalimentario, el textil, el metalúrgico o el calzado, y son sufragadas por una subvención anual que concede el Servicio de Empleo y Formación (SEF) de la Comunidad a la Fundación Séneca, dependiente de la Consejería de Universidades -donde no han dado explicaciones pese a los intentos de esta Redacción-, para que gestione los pagos y seleccione a los candidatos. Otras becas Séneca con financiación diferente no están afectadas.
Este año de crisis en las cuentas, la transferencia para becas ha sido aprobada pero aún no ejecutada por «dificultades de Tesorería», según argumentan fuentes de la Consejería de Empleo, que tampoco pueden asegurar cuándo habrá crédito disponible para pagar a los becarios. Cobraban unos 1.100 euros al mes.
Los investigadores afectados llevan sin cobrar desde julio, pese a que han prorrogado un año más su beca (comenzaron en 2010 y son de un máximo de tres años) y siguen acudiendo a trabajar. La situación es especialmente gravosa para quienes realizan sus becas en el extranjero, como José Gómez, desplazado en Polonia. A algunos de los becarios sus empleadores les han permitido que dejen de acudir al centro de trabajo mientras se soluciona su situación y alguna empresa se ha planteado adelantarles los pagos, pero la mayoría les obligan a seguir cumpliendo sus obligaciones laborales, lo que les conlleva gastos de transporte y manutención sin contraprestación. Además, la aceptación de la beca conlleva renunciar a buscar otro empleo o a recibir subsidios por desempleo.
Los becarios se quejan especialmente de la falta de explicaciones y compromisos sobre su situación. «Nos dejaron de pagar sin decirnos prácticamente nada», señala Pedro Cavestany. Él está haciendo el doctorado desarrollando un proyecto de robótica y visión artificial, es ingeniero industrial y tiene un máster, un perfil similar al del resto de afectados. Como Sergio López, que es biólogo especializado en Genética y está creando combustibles orgánicos. O Sergio Bravo, que estudia los efectos fisiológicos derivados del consumo de tomate. Un afán investigador que, desde hace tres meses, realizan exclusivamente por amor a la ciencia.
http://www.laverdad.es/murcia/v/20111028/region/comunidad-adeuda-desde-julio-20111028.html